Los videojuegos cambió su dinámica de ingresos: además de comprar el juego, ahora se abre un abanico de posibilidades para adquirir artículos y progresar u obtener beneficios, pero tiene otro lado peligroso, que creció tras la pandemia y con el que muchas familias lidian: la ludopatía.
En el Día del Gamer, 29 de agosto, ESET analiza el mundo de las apuestas y los videojuegos, la adicción que puede generar en niños y adolescentes, y el rol de los influencers que se benefician cuando los usuarios pierden.
“Hace pocos, los videojuegos solían ser una compra única. Pero ahora algunas empresas ofrecen los videojuegos gratis, siendo las «cajas de botín» (Loot Boxes) y otras transacciones, su principal fuente de ingreso”, comentó Camilo Gutiérrez Amaya de ESET Latinoamérica.
Las “Cajas de Botín”, son una dinámica de monetización que pueden esconder elementos o recompensas muy valoradas por las comunidades, y se adquieren en alguna fase puntual de un juego.
Algo que comenzó como un juego, se ha convirtido en preocupación para los padres y hasta gobiernos debido a su formato de apuestas estilo casino para obtenerlas, pues fomentan un gasto adictivo del consumidor.
Como consecuencia pueden ser muy graves: desde generar un hábito adictivo en los usuarios, como
el endeudamiento por grandes sumas de dinero.
Ludopatía en edades tempranas
Así, la ludopatía infantojuvenil emerge y se manifiesta en comportamientos compulsivos en videojuegos y apuestas en línea, entre otros.
Las grandes franquicias como Candy Crush, Fornite, FIFA, League of Legends, o Final Fantasy siguen lanzando títulos cuyos ingresos dependen en gran medida de las “cajas de botín” o microtransacciones.
Estudios recientes estiman que para 2025 las “cajas de botín” generarán más de 20.000 millones de dólares.
La diferencia fundamental entre los casinos y la dinámica en los videojuegos es que no cuentan con una licencia de juego de algún organismo oficial y, en muchos casos, tampoco ofrecen una verificación fiable que evite que los menores de 18 años hagan sus apuestas.
Papel de los influencers
La vinculación de los videojuegos y apuestas se ve, a veces potenciada por los influencers, pues muchos promueven plataformas de apuestas o recomendaciones que podrían llevar a sus seguidores a realizar apuestas.
Lo que se destaca en esta dinámica, es que varios de ellos reciben pagos y comisiones de estas plataformas de apuestas, basadas en las pérdidas de dinero de sus seguidores.
El conflicto de intereses es tan claro como controversial, los influencers tienen un incentivo financiero
para que sus seguidores pierdan dinero en vez de ganarlo.
Un ejemplo real sucedió en 2016 con los YouTubers TmarTn y Syndicate, quienes promovían sitios de apuestas de skins de Counter Strike, y fueron acusados por no revelar que tenían puestos sus intereses financieros en las páginas que promovían.
En ambos casos ganaban dinero por las visitas a cada uno de sus videos, pero también con las pérdidas de los usuarios en los sitios de apuestas que promocionaban y que hasta era de su propiedad.
Medidas adoptadas en el mundo
Muchos países han promulgado leyes y reglamentaciones en contra del funcionamiento de los sitios que operan en una zona gris, sin licencia oficial ni controles adecuados.
Buenos Aires envió cartas documentos a muchos influencers porque hicieron publicidad en sus redes sociales para plataformas de juegos de apuestas online.
Estados Unidos tomó acciones para regular el acceso de jóvenes a los sitios de apuestas online. Tienen leyes que obligan a estas webs a implementar tecnologías más avanzadas de verificación de edad y otras que limitan la cantidad de dinero que se puede apostar.
En el Reino Unido, la Comisión de Apuestas implementó regulaciones muy estrictas para limitar la publicidad de juegos de azar y el acceso a personas menores de edad; en España prohíben el acceso de menores a las cajas de botín para evitar conductas adictivas y en Australia introdujeron reformas para tener controles más estrictos sobre la identidad de los usuarios y prevenir el desarrollo de futuras adicciones.
Estudios recientes sugieren que las compras de “cajas de botín” y hábitos similares, pueden conducir a que los niños y adolescentes evidencien problemas de juego en el futuro y otros problemas severos.
Para evitarlo, desde ESET, se comparten acciones concretas que se pueden implementar para
acompañar y aconsejar a los más chicos en medio de este preocupante escenario:
- Tener conversaciones con los niños/adolescentes sobre sus actividades en línea e intereses.
- Dar información sobre qué es la ludopatía y sus consecuencias.
- Realizar un análisis en conjunto de las publicidades de apuestas, a fin de que puedan tomar buenas decisiones e incorporar buenos hábitos.
- Incentivarlos a que realicen actividades recreativas, sin el dispositivo móvil.
- Como personas mayores, dar el ejemplo y dar un uso equilibrado de los dispositivos.
Leave a Reply