David Bisbal celebró en Costa Rica sus 20 años de trayectoria musical, y terminó con la satisfacción del deber cumplido.
AIB Booking & Productions dispuso acertadamente que las puertas del recinto abrieran temprano, garantizando un acceso más que ordenado, y para entretener al público conforme ingresaban, los patrocinadores y Dj´s hicieron de la espera un rato agradable.
Eduardo Aguirre se encargó de hacer más amena la espera, pues se dedicó a deleitar a los presentes con su ya conocida calidad, temas de Luis Miguel, Chayanne y una interpretación de José José, fuera de serie.
Ya es conocida la voz de Aguirre, quien siempre tiene algo más para sorprender con su repertorio, mostrando nuevamente que trasciende los corazones del público que disfruta a más no poder sus presentaciones.
El reloj apenas pasaba las 8:30pm cuando en tarima aparecieron sus 5 músicos para provocar el inicio de la euforia del público del español.
«Ajedrez» fue la canción encargada de marcar el regreso Bisbal a Costa Rica, la bienvenida y por supuesto la algarabía de un público que durante mucho tiempo esperaba este reencuentro.
Derroche de Energía
Una noche cargada de energía, de principio a fin y la conexión con el público fue inmediata pues reconocieron, por no decir «disfrutaron» toda la energía que David ponía en el escenario.
La pregunta más común de la noche debió ser, ¿de dónde saca tanta energía David Bisbal?, pues bueno la respuesta no la tenemos, lo que sí podemos decir es que esa energía es contagiosa, porque fueron muy pocos instantes en los que él y su público estuvieron quietos, uno de ellos fue para interpretar «Mi Princesa».
Un repertorio bien preparado, hizo que los gritos se escucharan fácilmente en todo Belén, su recorrido por temas como Dígale, Esclavo de sus Besos, Me Enamoré de Tí y muchas otras.
Hablemos de la producción, nuevamente AIB se lució al hacer de este espectáculo una experiencia que permanecerá en la retina de miles de personas, todos los detalles fueron cubiertos, entre ellos puntualidad, sonido, orden, experiencias previas.
Volviendo con el español, sus 3 cambios de vestuario hicieron también las delicias del público femenino, especialmente cuando apareció con la nueva «Chema» de la Sele personalizada con el número 20 y Bisbal en el dorsal.
Con frecuencia lanzó besos, sonrisas, guiños, picardía y muchas otras muestras de cariño demostrando además de calidad la experiencia que durante 20 años de carrera lo han hecho uno de los artistas más vitoreados del mundo.
El final debía llegar a pesar que los presentes querían que el tiempo se detuviera para compartir la humildad, picardía, movimientos sexys y demás elementos que hicieron que los más de 100 minutos de recorrido musical valiera la pena para sus fans.
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