La Formación Integral permite la inserción de un joven al mundo del trabajo; puede ser una tarea compleja: cada día se exigen más competencias, habilidades y diversas sensibilidades, más allá de los conocimientos académicos. Es un deber de las instituciones educativas dársela a los jóvenes y que les permita enfrentar la (cada vez más) desafiante vida laboral.
Esa es la filosofía y la misión del Colegio Blue Valley: orientado a preparar a los estudiantes para el mercado laboral al fomentar la curiosidad, la participación activa y la aplicación del conocimiento en situaciones reales. El aprendizaje está diseñado para estimular a los estudiantes a explorar y cuestionar, con oportunidades para participar en actividades prácticas y reflexionar sobre ellas.
“Creemos que el éxito en un entorno laboral global no proviene exclusivamente de programas específicos, sino que está arraigado en tres principios fundamentales que atraviesan todas nuestras iniciativas educativas: la autonomía en la toma de decisiones, el empoderamiento para expresarse de manera respetuosa y asertiva, y la responsabilidad por mantener estándares académicos y éticos elevados”, expuso Kathryn Scanlan, Directora General de Blue Valley School .
Un viejo refrán enseña que un viaje de mil leguas empieza con un paso. Por ello, las oportunidades al estudiantado se inician a edades hasta su culminación en undécimo o duodécimo año.
“Nuestros estudiantes reciben numerosas oportunidades para tomar decisiones y elegir el camino que consideren más adecuado. Esta exposición temprana a la toma de decisiones les ayuda a desarrollar habilidades analíticas y asumir la responsabilidad de sus actos”, explicó Scanlan.
De tal modo, las instituciones deben preparar a los estudiantes para sobresalir en un mercado laboral global dinámico y competitivo, para formar una próxima generación con líderes e innovadores globales, con las herramientas necesarias para adaptarse y prosperar en un mundo en constante cambio.
Vista al futuro
En su informe El futuro del trabajo (2023), el Foro Económico Mundial identificó una amplia gama de habilidades que serán esenciales para el éxito en el mercado laboral del futuro: pensamiento crítico, óptima disposición del tiempo, inteligencia emocional, liderazgo, capacidad de persuasión, creatividad, adaptabilidad, uso y control de la tecnología y de la inteligencia artificial, entre otras.
Sabiendo esto, es importante que las instituciones se comprometan en preparar a los estudiantes para este futuro incierto con el desarrollo de habilidades como el pensamiento crítico y la resolución de problemas, la creatividad, la inteligencia emocional, las habilidades sociales, la competencia digital y el aprendizaje continuo.
“Más que solo habilidades académicas, las instituciones deben enfocarse en el desarrollo integral de los estudiantes. Creemos que la capacidad de adaptarse, colaborar y crecer en un entorno en constante cambio es crucial para el éxito en la vida. Por eso, debemos brindar oportunidades para que los estudiantes desarrollen su inteligencia emocional, habilidades sociales y competencia digital”, aseguró
vocero.
Asimismo, las colaboraciones con empresas locales e internacionales para brindar a nuestros estudiantes oportunidades de aprendizaje práctico, son fundamentales.
Una de estas iniciativas destacadas en el Colegio Blue Valley es su proyecto STEAM (carreras en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) en colaboración con el programa CODED, donde sus estudiantes tienen la oportunidad de trabajar con ingenieros de parques de atracciones de Disney en Florida.
Este proyecto les permite aplicar conceptos teóricos en un entorno real y desarrollar soluciones innovadoras. Sabemos que los estudiantes algún día se insertarán en el mundo del trabajo.
Cuando eso suceda, deberán disponer de una educación integral, con experiencias prácticas y colaborativas para un mundo globalizado y en constante cambio.
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